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marzo 07, 2017
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República
Dominicana. Residentes en el sector Villa Faro, del municipio Santo Domingo
Este, pidieron este lunes a la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la
Dirección Anti-narcóticos (Dican), de la Policía y al Departamento Anti-ruidos
Los denunciantes informaron al Bloque Dominicano para los
Derechos Humanos (BDDH) que al Colmado Maicol II, propiedad de la señora Olga
María Brito, acuden consumidores de drogas que luego se instalan frente a la
casa número 9 donde vive alquilada una dama de nombre Deyanira. “Parece que Deyanira
tiene algún tipo de negocio porque de vienes a domingo enciende una radio a
todo volumen y apaga pasada las tres de la mañana y como por arte de magia
nunca aparece una patrulla policial del destacamento de Villa Faro. Ese olor a
drogas que se desprende de las hookahs está afectando a todos, principalmente a
los niños.
Narraron al BDDH que la propietaria del colmado y
Deyanira no tienen consideración con los vecinos quienes les han manifestado la
zozobra que les afecta y lo insoportable de la situación. “Los vecinos tenemos
que limpiar la suciedad que dejan los fumadores de drogas que acuden al
Colmado Maicol II y al frente de la
vivienda de Deyanira ya que éstas se muestran indiferentes hasta para recoger
la basura y cuando se arman trifulcas por disputas de puntos de drogas esto se
convierte en un campo de batalla. Si la DNCD, la Dican y Anti-ruidos no intervienen
lo antes posible entonces los residentes buscarán una solución”, advirtieron.
El BDDH constató que un directivo de esta entidad se
comunicó con el 911 la madrugada del sábado al domingo pero un operador lo dejó
en línea unos veinte minutos por lo que descolgó el auricular, luego una
operadora devolvió la llamada. “Este directivo del BDDH le explicó la situación
y le indicó la dirección del colmado y de la vivienda dando la impresión que la
operadora del 911 sabía de qué colmado se trataba pero la patrulla policial del
destacamento de Villa Faro nunca se presentó.
Después se produjo otra llamada
al 911 y en la conversación del directivo del BDDH y la operadora del 911
parece que intervino un agente policial que le indicó al directivo de los
derechos humanos que presentara la denuncia por Anti-ruidos”.
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