El señor Learie Barclay, Director de Operaciones de Roraima Airways, de Guyana; visitó la Basé Aérea San Isidro, con la intención de observar las características que presenta la aeronave, “TP-75 Dulus”.
Barclay fue recibido por la teniente coronel técnico de aviación Denisse Marlene Bueno Hache y el coronel técnico de aviación, Roque Mercedes Núñez, comandante del Comando de Mantenimiento Aéreo y el comandante del Escuadrón de Mantenimiento de Campo, respectivamente, además, el capitán técnico de aviación Waldo Pons.
El objetivo de la visita, conocer las bondades y características, ante una posible adquisición.
Sobre las aeronaves
Este tipo de aeronave, se trata de un ensamble de aviones que realiza la Fuerza Aérea de República Dominicana (FARD), como parte del proyecto que ha sido denominado “Dulus”, cuyo nombre es en honor al ave nacional del país, la cigua palmera, de la especie “Dulus Dominicus”.
Las aeronaves son productos de la compañía italiana Flying Legend, con asiento en Estados Unidos, que fabrica réplicas de las Tucano, siendo dos de sus patentes la “Tucano R– Experimental” y la “Tucano R– Deporte ligero”.
De ahí a que el nombre TP-75 Dulus sea un acróstico: la “T”, el inglés “training” (entrenamiento), la “P” el inglés “patrol” (patrullaje) y el número 75, por el aniversario de la FARD.
Base: Tucano R– Experimental
El modelo original de la TP-75 Dulus ensamblada por la FARD está basada en la “Tucano R– Experimental”, comprada a Flying Legend al costo unitario de US$350,000, equivalentes a RD$20,562,500.
La Tucano R– Experimental, según describe la firma en su portal oficial, “es una réplica, el 70% de su tamaño, del avión de entrenamiento Embraer EMB-312 Tucano, con tren de aterrizaje retráctil y hélice de paso variable, una elección correcta de avión para pilotos que soñaban con volar un pájaro de guerra con la sensación de volar en una caza militar”.
Las aeronaves están capacitadas para realizar “todas las maniobras del entrenamiento militar, además, de misiones de patrulla silenciosa y algunas de ellas estarán ubicadas en la base aérea de Barahona, para reforzar la seguridad fronteriza”.
La versión escogida por la FARD está dotada de un motor turbo cargado Rotax 915 is con hélice de cuatro palas, que le permiten alcanzar una velocidad de 287 Km/h y un alcance máximo de 1.166 km.
publicado 8 de agosto 2024
No hay comentarios
Publicar un comentario